«Sólo una cosa no hay, es el olvido.»
Everness, Jorge Luis Borges
Y si lo dice Jorge Luis Borges no vamos a entrar en discusiones. Yo le agregaría que los recuerdos permanecen en algún lugar recóndito de la mente aunque a veces no podamos (o no querramos) rememorarlos.
Por el contrario muchas veces me pasa que un estimulo cualquiera, una foto, una canción, un aroma….algo; pone en marcha los engranajes de un mecanismo de relojería que comienza a recorrer los laberintos escondidos de la mente desatando una concatenación de pensamientos. Como si neuronas que no se conocían, o que no se veían mucho hicieran sinapsis por algún mandato secreto y uno terminara recordando detalles triviales que parecían archivados o perdidos en la memoria. Como no creo que esté muy claro, mejor explicarlo con un hecho concreto.
A esta hora siempre me doy una vuelta por las redes sociales, sobretodo por twitter. Me informo, me distraigo y me entretengo mirando fotos o leyendo frases ingeniosas.
Hoy una foto en blanco y negro, que no tiene ninguna relación con lo voy a contar, me hizo recordar una muestra de fotografías que vi hace algunos años en el Museo de Bellas Artes de un país vecino. En principio la recuerdo porque eran fotos de gente mutilada y eso me causó una fuerte impresión. Pero la sucesión de pensamientos finaliza con la imagen de mis zapatillas, como se ven cuando uno esta parado y las ve desde arriba. Porque terminé casi reviviendo un momento incómodo mientras me desplazaba por la sala. Mis zapatillas producían una especie de chillido por el movimiento del pie contra el piso de parquet encerado. Ese ruido alteraba la calma solemne que se respiraba en la sala del museo y me sentía observado por el resto de las personas. Así rememoré ese episodio mínimo que parecía borrado de la mente.
Tal vez la explicación se encuentre en el libro «Usar el cerebro» donde el Dr Facundo Manes habla de la memoria autobiográfica.
«Los hechos autobiográficos con fuerte carga emocional se recuerdan más detalladamente que los hechos rutinarios con baja implicancia emocional. ¿Acaso no conservamos el recuerdo de que estábamos haciendo el 11 de setiembre de 2001 por la mañana? y el día siguiente ¿también lo recordamos?»
PD: Ya que el post se trata de recuerdos y olvidos, luego de una semana de búsqueda intensa pude encontrar el libro del Dr Manes, porque no recordaba adonde lo había dejado.
Es increíble cómo un chispazo nos traslade a un episodio de nuestra vida trayéndonos de regreso hasta el mínimo detalle…
Y es tan increíble pues en este momento no recuerdo ni qué almorcé ayer…
Me gusta leerte, Alejandro.
Gracias por compartir.
Un abrazo
Es así, a veces recordamos detalles de acontecimientos pasados, y a la hora de la cena olvidamos lo que comimos al mediodía (a mi me pasa todos los días).
Mal de muchos….
Gracias por el comentario, un abrazo
Tu escrito ha sido como pensamientos en voz alta… Muy bueno! Mientras lo leía aparecían en mi cabeza recuerdos, sensaciones… E incluso pude responder la pregunta que hace Manes en la cita…
Saludos Alejandro!
Recomiendo el libro del Dr Manes. muy interesante y muy ameno para leer.
Gracias por el comentario.
Saludos.