«Yo que sentí el horror de los espejos
no sólo ante el cristal impenetrable
donde acaba y empieza, inhabitable,
un imposible espacio de reflejos»Los espejos: Jorge Luis Borges
Mi llegada al hotel marcaba el fin de tantos meses de contratiempos y esperas. El fin del largo viaje el comienzo de mis días de descanso.
Sé que estoy dentro de mi habitación pero no logro distinguir nada, no es oscuridad, un plano de color canela ocupa todo mi campo de visión, miro alrededor pero me rodea un vacío monocromo. Respiro hondo y trato de relajarme. Espero con ansiedad, muy lentamente del color canela comienzan a formarse objetos en tres dimensiones, una silla de estilo antiguo se empieza a dibujar frente a mi, pero esa silla no es de ahí, pertenece a otra ciudad que visité hace dos años. Siempre en el mismo tono canela descubro una cama que surgió de la nada en medio del cuarto. No hay ventanas, no hay cuadros, tendría que sentirme feliz por estar de vacaciones pero el lugar tan despojado me produce una sensación de encierro y de incomodidad.
Como siempre viajo solo no me preocupo en cerrar la puerta cuando entro al baño. Sin embargo noto con sorpresa que una persona con grandes pasos camina por el cuarto. Cuando descubre mi presencia me hace señas obscenas para decirme que esa es su habitación, veo que fuma pero su cigarro no deja volutas, ahora un humo celeste cubre todo, apenas se puede ver el techo color canela. Estoy muy enojado y mi primer impulso es ir a golpearlo, pero me contengo. Mejor ir a a quejarme con algún responsable del hotel, me molesta compartir la habitación con alguien que fuma, pero cuando intento salir me cruzo en la puerta con el conserje, él me empuja hacia adentro temiendo que haga un escándalo.
Ahora el conserje discute con el intruso un tema de dinero. Como los dos ignoran mi presencia, camino y descubro que la habitación tiene otra sala, veo un espejo enorme apoyado sobre una mesa pequeña, supongo que es del intruso. Temiendo que se caiga de la mesa me paro delante del espejo pero contemplo con horror que este no me refleja, sólo veo el techo canela. Me preocupo por mi equipaje, por la computadora. me laten las sienes, pierdo nuevamente la visión y los objetos se vuelven a sumergir en el color canela….
Mi angustia es tal que me despierto agitado. De nuevo estoy en mi país y en mi habitación, me lleva varios minutos reponerme del sueño tan vívido. No me puedo quitar la sensación que el intruso me acompaño en el sueño y ahora camina por la casa. Trato de develar si no verme reflejado en el espejo posee algún significado en el misterioso mundo de los sueños.
Me pregunto que significan los espejos en los sueños.